Hacer crecer a los hijos dentro de la organización.

Dar funciones, definir objetivos y exigir rendición de cuentas.

En el libro “Modelos de Empresa Familiar”, los profesores Alberto Gimeno, Gemma Baulenas y Joan Coma-Cros presentan los modelos evolutivos de la empresa familiar e invitan a reflexionar en qué modelo se encuentra nuestra empresa y a cuál aspiramos.

Este proceso tiene que ver con la línea de tiempo de la empresa, desde que el emprendedor la creó, pasando por la incorporación de los hijos, hasta llegar a modelos sofisticados como el “Modelo Corporación” y “Grupo de Inversión Familiar” en donde la empresa familiar ya se ha transformado en familia empresaria.

Los modelos Capitán, Emperador y Equipo familiar

A la primera etapa de la empresa se le domina “Capitán”; se caracteriza porque el fundador realiza TODAS las funciones: compra, vende, produce, cobra, paga, contrata, etc.

Cuando la empresa empieza a crecer y se incorpora algún integrante de la familia, se define como “Emperador”; en esta etapa, el fundador toma todas las decisiones y el empleado familiar sigue, cabalmente, las instrucciones que le da el fundador.

El tercer modelo llamado “Equipo Familiar” se da cuando varios de los hijos, tal vez todos, ya se encuentran trabajando en la empresa; en esta etapa, el patrón de comportamiento y accionar del fundador sigue siendo exactamente el mismo, o sea, él sigue tomando todas las decisiones, pero con más integrantes.

Antes de pasar al siguiente modelo quiero compartirte una historia.

Un Gran Capitán

En 1973, Francisco Gutiérrez, después de aprender el oficio de su padre, fundó una distribuidora de productos de limpieza e higiene, “Comercializadora Gutiérrez”.

Él fue un Gran Capitán; con el paso de los años abrió varias sucursales en la Ciudad de México.

Tuvo 4 hijos, todos se incorporaron al negocio, algunos después de estudiar una licenciatura, otros al acabar la prepa. Esas manos adicionales le permitieron crecer, traer más líneas de productos y entrar a otros mercados como el industrial.

El negocio creció, pero no sus hijos.

El fundador solo les asignó tareas de poca importancia donde el papá lo que necesitaba era que alguien “arrastrara el lápiz”. Todos se dedicaron a seguir las instrucciones del papá. El papá siempre tomó todas las decisiones. Hoy en día, sigue tomando todas las decisiones.

Como el caso de la familia Gutiérrez existen infinidad de empresas atoradas en el “Modelo de Equipo Familiar” donde, sin importar edad, preparación profesional, experiencia, motivación y compromiso, los hijos no generan valor a la empresa más allá de tareas rutinarias que la operación demanda y que frenan el crecimiento de la empresa.

Modelo de Familia Profesional

Regresando a los modelos de empresa familiar, el cuarto modelo se denomina “Modelo de Familia Profesional”. En esta etapa, a diferencia de las anteriores, se agrega un elemento sumamente importante que cambia totalmente el desempeño de la familia dentro de la empresa, su dinámica y la generación de valor.

En este modelo los empleados familiares, generalmente directores de la empresa, contribuyen con los resultados a través del rol que desempeñan perfectamente definido, los objetivos que deben cumplir y la rendición de cuentas entregan, generalmente, a un consejo de administración o a un consejo consultivo. A diferencia de las demás, esta gestión es profesional.

  • ¿Por qué los fundadores de empresas familiares tardan tanto en entender que las sinergias se logran cuando se aprovechan las fortalezas del equipo y se puede generar más de lo que un solo hombre puede hacer?
  • ¿Por qué no confiamos en nuestros hijos y les exigimos el máximo rendimiento dentro de la organización?
  • ¿Por qué los procesos de sucesión se van postergando y el fundador llega a etapas avanzadas de su vida y no tiene a quién darle la estafeta por no tener un sucesor preparado?
  • ¿Qué pasa en una empresa familiar cuando hay una contingencia y los hijos no están listos para asumir la gestión de la empresa?

El reto de los fundadores es entender que los hijos son el motor de crecimiento de la empresa.

¿Quién mejor que un hijo que ha crecido en la era de la tecnología, que tiene la capacidad de reaccionar a los cambios del entorno, que puede ir a la misma velocidad que se requiere y puede mantener a la empresa en forma competitiva, rentable y viendo hacia el futuro?

El reto de los hijos es leer el momento en el que estamos, salir de la zona de confort, arremangarse la camisa y generar y pensar en el tipo de empresa que quiere dejarle a la tercera generación.

Nuestro reto como consultores es convencer a los fundadores de que una sus tareas más importantes es hacer crecer a los hijos dentro de la organización, darles funciones, definirles objetivos y exigirles rendición de cuentas.

Ante estos retos es imperativo que tanto el fundador como la segunda generación tengan una “Familia Profesional” al igual que una “Empresa Institucionalizada” que coadyuven para que la empresa siga en manos de la familia.

Ceder la gestión

Francisco Gutiérrez se encuentra en un gran dilema: a su edad le cuesta tomar decisiones asertivas, sin embargo, no cede a sus hijos la gestión de su empresa.

¿Será por temor a perder el poder? ¿Se siente amenazado por sus hijos que están más preparados que él? ¿No sabe cómo para que se convierta en un ganar-ganar para todos (familia y empresa)? ¿Qué estará haciendo la competencia mientras él se debate entre hacer y no hacer? ¿Cómo sería la empresa si midiera el desempeño de sus hijos y el logro de los objetivos asignados? ¿Por qué no acepta que los hijos piensen diferente a él?

¿Por qué Francisco no aprovechó la juventud, empuje y deseos de sus hijos José Francisco, Fernanda, Agustín y Adriana para tener una “Familia Profesional” que atendiera el presente y se preocupara y ocupara del futuro?

Con Consultores OC tendrás, querido fundador, el apoyo que requieres para tomar la mejor decisión. Te suministramos las herramientas necesarias para hacer crecer a tus hijos dentro de la organización, darles funciones, definirles objetivos y exigirles rendición de cuentas.

La diferencia entre una empresa “Modelo de Equipo Familiar” y “Modelo Familia Profesional” está en tus manos. Contáctanos.

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